Laia adora a los animales, sobre todo los marinos, y tiene clarísimo que cuando sea mayor va a colaborar con una asociación relacionada con ellos. Además, le gusta tanto el mar, que sueña con ser una sirena… así que en el puerto de Valencia, Laia se convirtió en sirena para visitar Río Safari, donde la esperaban unos leones marinos muy simpáticos para nadar con ella.
Los papás de Laia y su hermana estuvieron en todo momento muy de cerca con ella para no perderse nada y disfrutaron juntos del parque, de los toboganes de agua y de los animales que tanto le gustan a Laia.
Laia se llevó de recuerdo un león marino de peluche, al que puso de nombre Nerón, como el primero con el que se bañó.
Muchísimas gracias a Fundación Susana Monsma por hacerlo posible y a Fundación Río Safari Elche, en especial a Andrea, por ayudarnos a cumplir el deseo de Laia.