A Martín le encantan los coches eléctricos y siempre ha soñado con tener uno. Así que nuestra varita hizo toda su magia y un día que fue a visitar a sus tíos le estaba esperando su personaje favorito de la Patrulla Canina junto a una enorme caja y… ¡Era un quad como el que siempre había soñado!
Gracias a la Fundación Inocente Inocente por ayudarnos a hacerlo posible y a Andrea de ATAA CARS por su colaboración para cumplir el deseo de Martín.