Lucía convive desde siempre con una enfermedad rara que la ha llevado a pasar gran parte de su vida en hospitales. Aun así, su amor por los perritos nunca se ha apagado.
Su gran sueño era tener un pomerania y conocer a Lola, una criadora a la que sigue y admira con todo su corazón.
Desde la Fundación Pequeño Deseo quisimos sorprenderla con un día que jamás olvidará. Organizamos un viaje a Madrid para que pudiera conocer a su ídola… y allí le esperaba la mayor de las alegrías: ¡su nueva perrita pomerania!
Lucía volvió a casa con una amiga inseparable y el corazón lleno de ilusión. Un día repleto de emoción, energía y ternura que le dio un enorme impulso para seguir adelante.
Porque cumplir un deseo no solo regala sonrisas: también aporta fuerza y esperanza en medio de la enfermedad.
Gracias a la Asociación de Voluntarios de Fundación La Caixa por su apoyo constante, a Spain diamantes del Mediterraneo por ayudar a que Lucía tuviera su nuevo perrito, y a Vivenio living, por prestarnos el mejor de los escenarios para hacer este deseo realidad.