Carolina practica la gimnasia rítmica desde que tenía 6 años y se le da muy bien, tanto la pelota como el aro, pero a raíz de la detección de un osteosarcoma y tras una operación, se vio obligada abandonar su entrenamiento.
Gracias a la complicidad de sus padres y la gran ayuda de la Real Federación Española de Gimnasia Rítmica (RFEG), pudimos organizar en Madrid un encuentro con su gimnasta de referencia, Alba Bautista.
Carolina, además de ver entrenar a Alba junto a sus compañeras, practicó con ellas algunos ejercicios y Alba le hizo un regalo muy especial: una pelota que ella misma había utilizado en sus competiciones con una dedicatoria personalizada. Fue un día de muchas emociones, donde la gimnasta y sus compañeras recibieron a Carolina con los brazos abiertos, animándola e invitándola a volver siempre que quiera. Y como nos decían sus padres, vuelven a Jaén con las pilas cargadas, con el corazón lleno y con mucha fuerza para afrontar la próxima tanda de quimio.
Muchísimas gracias a Real Federación Española de Gimnasia Rítmica (RFEG)por ayudarnos con tanta implicación; a Alba Bautista por su cariño, dedicación y simpatía; a las gimnastas del equipo individual español y de conjunto, a todo el equipo técnico y entrenadoras, y al CSD por la gran acogida y hacerlo posible en el CAR de Madrid. Gracias también a nuestra embajadora Inés Martín Alcaide por acompañarnos y a Fundación Occident por estar siempre a nuestro lado, apoyándonos para hacer que deseos como el de Carolina ASV 20 sean una realidad.